La verdad, las vi preciosas,pero fueron como la manzana de Blancanieves, roja, brillante y preciosa por fuera, y un desastre por dentro.
Las saqué de postre para la cena y las caras de toda la family fueron un poema....me encontré con unas fresas que se habían quedado blandas en menos de dos horas de la compra, sin sabor, y realmente ni un poco de balsámico las resucitaba.
Como no quería tirar 900gr de fresas, y mi marido tiene que desayunar mermelada sin azúcar, me decidí a aprovecharlas de esta manera, si no salía buena ya tendría tiempo de tirarlas.
Puestos a hacer mermelada, la he hecho con la Thermomix, hacer los mismos pasos para hacer en olla a fuego.
Poner las fresas limpias en el vaso, junto el zumo del limón y una manzana pequeña cortada a trozos. Programar 20 minutos, Varoma, V1, con el cestillo girado sin cubilete.
Cuando finalice mirar como ha quedado y si hace falta triturar un poco los trozos de fresas, según o guste más o menos triturada. Añadir el edulcorante en polvo, probarla si la queréis un poco más dulce, a mi así ya me ha gustado.
Poner la mermelada en un frasco de cristal bien limpio y si hace falta hervido, el mio era nuevo, lo digo por las olores que a veces quedan.
Llenar hasta arriba, tapar y girar boca abajo hasta que esté completamente fría.
Podéis apreciar el color y consistencia, y de sabor deliciosa, mirar que edulcorante utilizáis, algunos aciertan mucho el dulzor, muy parecido al azúcar, otros no valen tanto.
Fresas salvadas!!!!